Apenas pasa un día sin que la industria informe sobre la fragmentación de la audiencia. Por supuesto, no es un fenómeno nuevo. Con el auge del cable en los años 80, la difusión digital por satélite en los 90, el vídeo por Internet en los 2000 y, más recientemente, las opciones over-the-top, el público televisivo ha disfrutado de un flujo constante de nuevas opciones de programación año tras año: Más cadenas, más programas especializados y más formas de verlos.

Para la comunidad investigadora, sin embargo, esa mayor diversidad ha tenido un precio, y la aceleración del ritmo de cambio en los últimos años está poniendo a prueba las capacidades de medición basadas en paneles en las que históricamente ha confiado la industria para controlar la actividad televisiva. Simplemente, se ha convertido en un reto reunir paneles lo suficientemente grandes como para proporcionar mediciones estables de programas con audiencias reducidas.

Los datos de la ruta de retorno (RPD) representan una oportunidad para superar ese problema, pero sólo si se pueden corregir y validar las limitaciones y sesgos de estos datos. Este artículo describe cómo los paneles pueden corregir eficazmente estas limitaciones y ayudar a validar las valoraciones derivadas de los conjuntos de datos RPD.

Los paneles y el RPD juntos representan una combinación ganadora para la medición precisa y estable de la audiencia de vídeo.