El timeshifting global por parte de las audiencias televisivas estadounidenses aumentó significativamente en el tercer y cuarto trimestre de 2010, con un estadounidense medio viendo casi 10 horas y media de televisión en diferido a finales de 2010. El mayor incremento interanual se produjo en el tercer trimestre, cuando el timeshifting aumentó un 17,9% respecto al mismo periodo de 2009, frente al 13,4% del cuarto trimestre.
Estos aumentos globales del timeshifting no se deben a un mayor número de visionados de DVR por hogar, sino a un mayor número de hogares que utilizan DVR. Durante el cuarto trimestre, la persona media en un hogar con DVR vio casi 26 horas de televisión en diferido al mes, un aumento interanual de 19 minutos.