La música no conoce fronteras en Estados Unidos. Es el gran ecualizador entre consumidores de distintas edades, idiomas, razas, ingresos, géneros y geografías. La música es a menudo un espejo y un puente hacia una sociedad cada vez más diversa. Madonna tenía razón cuando cantaba que "la música hace que la gente se una", pero esa convergencia sonora y humana es cada vez más multicultural, de modo que los aficionados a la música de todas las razas y etnias de Estados Unidos y el extranjero se sienten bienvenidos a la fiesta.
Los consumidores afroamericanos, asiático-americanos e hispanos representan la vanguardia de las tendencias musicales en EE.UU. Impulsan el desarrollo del gusto musical y adoptan con facilidad nuevas formas de consumir música. Así que, mientras este grupo de consumidores multiculturales sigue abriendo caminos de gusto y adopción, las empresas interesadas en comprender el futuro de la música harían bien en mantener a este creciente grupo demográfico en lo alto de sus listas de compromisos.
¿Quién es el consumidor multicultural?
El consumidor multicultural es cada vez más el consumidor estadounidense. Desde 1990, la proporción de la población estadounidense que se identifica como afroamericana, asiático-americana o hispana ha pasado del 24% al 37%. Y según las proyecciones actuales del censo de EE.UU., estos grupos constituirán la mayoría de la población estadounidense en 2043. Sin embargo, si nos fijamos solo en los consumidores menores de 18 años, las proyecciones del Censo de EE. UU. de 2012 prevén que el punto de inflexión de la mayoría minoritaria llegará en solo cuatro años.
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