Todavía queda mucha televisión de calidad por ver a medida que 2017 se acerca a su fin, pero aunque la programación televisiva ha ofrecido un variado conjunto de contenidos creativos -desde series con zombis de hielo a misterios de asesinatos, pasando por personajes de la alta sociedad que se pelean en la vida real o series con zombis normales y corrientes-, los verdaderos triunfadores del año parecen ser los espectadores, que tienen al alcance de la mano un vertiginoso abanico de formas de ver y programas entre los que elegir.
En general, la televisión en 2017 ofreció un poco de algo para todos, incluso en lugares que no esperábamos. Los deportes reinaron en la mayoría de las 10 mejores retransmisiones del año, pero fueron los Patriots de Nueva Inglaterra y su histórica remontada en la Super Bowl los que ofrecieron momentos de esperanza o desesperación, que podrían haber sido su propia serie de televisión emocionante.
Millones de espectadores se reunieron para ver la entrega de premios a las mejores películas, programas de televisión y música del año, y fueron testigos de un puñado de momentos planeados (y en algunos casos, no planeados).
Los telespectadores también encontraron una vía de escape semanal a las tensiones de la vida real en las historias de amor y desamor familiar, los dramas médicos en torno a doctores inspiradores y el regreso de personajes cómicos conocidos en lugares antiguos y nuevos.
La posibilidad de ver los programas en diferido siguió animando al público a seguir sintonizando y explorando nuevos contenidos en su tiempo libre. Tanto las modelos de pasarela como los payasos villanos vieron aumentar su audiencia en los primeros siete días de emisión.
En general, los aumentos porcentuales de audiencia de los 10 principales programas en diferido de 2017 superan con creces los de sus hermanos de 2016. Por ejemplo, el primer programa en diferido del año pasado registró un aumento de casi el 280 % en espectadores, mientras que el primer programa de este año se benefició de un aumento porcentual que superó los 380 puntos porcentuales.
Sin embargo, hoy en día la televisión no es sólo cuestión de audiencia: con una gran variedad de aplicaciones de redes sociales al alcance de la mano, los consumidores siguen interactuando con los programas y con sus seguidores. Este año, los pesos pesados de la televisión han podido reforzar su estatus, ya que algunos de los programas más vistos del año también se han hecho un hueco en las redes sociales.
Sin embargo, no hay que descartar a los más pequeños: programas que no han alcanzado el top 10 de audiencia lo han compensado con su repercusión social, lo que demuestra el valor dinámico de la televisión en 2017.